En un mundo en el que existen innumerables cremas faciales y lociones para reafirmar la piel, se podría suponer que hidratar las plantas de interior podría ser una hazaña desalentadora en comparación. La verdad es que sólo hace falta un elemento sencillo para aportar humedad y mantener hidratadas las hojas de tus plantas tropicales de interior: ¡el agua! La advertencia es que el agua debe estar en esa misteriosa forma de vapor, conocida como humedad.
Dado que muchas de las plantas de interior que se ven son de regiones del mundo que tienen naturalmente una alta humedad, a veces es necesario añadir un poco de humedad extra al aire que las rodea para que se sientan como en casa y libres de manchas. Algunas plantas de interior requieren a veces aire humedecido, como la calathea, los helechos, la geogenathus, la alocasia y la begonia, por nombrar algunas. He aquí cuatro maneras fáciles de infundir el aire con agua.
1. Aumenta la humedad conectando y listo
La forma más eficaz y rápida de aumentar la humedad en su casa es añadir un humidificador si vive en un clima seco, o durante el invierno en climas más fríos cuando se calienta la casa. Los climas secos pueden ser duros para las plantas tropicales de interior, así que considera la posibilidad de utilizar un humidificador de vapor frío, ultrasónico o de vapor caliente cerca de tus plantas de interior durante al menos 6 horas al día.
Puede sopesar los pros y los contras de cada tipo de humidificador para ver cuál es el más adecuado para usted. Te recomendamos que mantengas el humidificador alejado del suelo, ya que algunos tienden a dejar caer un anillo de humedad alrededor del aparato. Intente colocar el humidificador en una bandeja resistente al agua y manténgalo alejado de una zona muy transitada. Evite que la niebla rocíe directamente sobre las hojas, ya que esto podría causar moho, hongos u otros problemas si las hojas están húmedas durante mucho tiempo.
2. Humedad mediante vasos de vapor
Otra forma eficaz de aumentar la humedad alrededor de tus plantas de interior sin tener que usar electricidad es llenar un jarrón decorativo con agua fresca y colocar el jarrón cerca de la base de la planta. El agua se evaporará y expondrá la superficie de la hoja a un suministro lento pero constante de humedad centralizada. Si los niveles de humedad de tu casa son bajos, te sorprenderá la frecuencia con la que tienes que rellenar el recipiente. Esta es una excelente oportunidad para mejorar el estilo de tus plantas y puedes añadir toques de color, textura y capricho con tu jarrón, tazón o jarra favoritos.
3. Bandejas por días
Si te encantan las bandejas, y nos referimos a que te encantan todo tipo de bandejas decorativas, ¡entonces puede que no tengas más remedio que elegir esta opción! Utiliza una bandeja plana impermeable con un labio sólido alrededor y llena el fondo de la bandeja con guijarros, vidrio liso de colores o azulejos de cerámica hasta aproximadamente la mitad de la altura del labio. Añade agua en la parte superior de los materiales que hayas seleccionado y luego coloca tus plantas en la bandeja. Cuanto más grande sea la bandeja, mejor, ya que creará más superficie de evaporación y podrás colocar más plantas de interior en ella y absorber la humedad mientras sube y circula.
El concepto aquí es no sumergir nunca las raíces de tus plantas en el agua, y los guijarros, el cristal o cualquier material que utilices soportará el peso de las plantas mientras evita que toquen el agua.
4. Hidratación por multitud
Muchas plantas de interior se sienten cómodas en una multitud. Colocar las plantas de interior cerca unas de otras puede aumentar la humedad a su alrededor, ya que pueden utilizar la humedad que desprenden las plantas de alrededor durante la transpiración. Intenta agrupar plantas que tengan los mismos requisitos de cuidado y crea un microambiente para tus plantas amantes de la humedad. Asegúrate de dejar un poco de espacio entre cada planta para permitir una buena circulación del aire.
Tus plantas te hablarán y te harán saber que necesitan un poco más de humedad en el aire mostrándote señales de que están secas. Si las puntas y los bordes de las hojas se están volviendo marrones y secas, prueba a utilizar uno de estos 4 consejos para añadir humedad. Tus plantas te lo agradecerán.